Juventud , divino tesoro...

No sé quien eres y la verdad sea dicha , me da igual , llevas más de 3 horas en la misma banqueta y es el cuarto Gin-Tonic que te sirvo , tus ojos delatan culpabilidad y arrepentimiento por algo que has hecho , que harás de inmediato o en un futuro no muy lejano. Las uñas clavadas en las rodillas , la mirada perdida , labios mordidos.
Te sientes mal pero orgullosa , orgullosa pero traviesa . Recuerdas esos años en los que eras más joven (¿Cuántos ahora? ¿34?,¿35?), te gustaría ser libre y despreocupada como entonces , pero con los años has perdido impermeabilidad. Ahora la sociedad te pide cuentas , tienes que responder ante ella , aparentar ser una ciudadana más , y eso parece alterar tu forma de ser.

Yo, sólo puedo animarte a través de la mirada , transmitirte seguridad en ti misma , mientras preparo tres cafés con leche te miro y a la vez te digo : Hazlo. No lo pienses y hazlo, sea lo que sea. Una vez hecho te sentirás joven , libre , desvergonzada.

- ¡Camarero! , ¿Puedes decirme que te doy? - Me gritas, nerviosa.

Mientras voy hacia la caja , nuestras miradas se cruzan , creo que me vas entendiendo.

Cuando me doy la vuelta , observo cómo de un salto te has bajado de la banqueta y has cogido tu bolso ,el abrigo y sales corriendo. Sin pagar , obviamente.

¿Ves? , tenía razón. ¿Como te sentiste? , ¿libre? , ¿joven? . En efecto, mi mensaje te llegó , Hija de Puta.